El queso Mozzarella es un tipo de queso que originalmente se obtenía de la leche de búfala, sin embargo actualmente se produce con leche entera de vaca. El que se elabora de leche de búfala suele ser muy graso. Sus características principales son una pasta muy blanda, grasa y elástica.
Es un queso de origen italiano, suele tener 246 calorías cada 100 gramos, y los que se elaboran a partir de la leche de vaca contienen un 18% de proteínas.
La elaboración de este tipo de queso puede ser de dos formas:
• Tradicional: se elabora a partir de leche fresca, la cual se le separa el suero a través del cuajo y algunas bacterias acido-lácticas (fermento). Obteniendo en este proceso la cuajada, los cuales son los sólidos de la leche. Luego se coloca la cuajada debidamente acidificada y cortada en cuadritos, en una cacerola con agua a más de 60º C. Allí los cubos de la cuajada se empiezan a unir debido a la temperatura y a la acidez.
Esto se convierte en una masa de apariencia brillante y como un chicle gigante, la cual se puede estirar algunos metros. Luego se forman las bolas de queso mozzarella. La elaboración de este queso es fuerte debido a la alta temperatura con la que se debe manejar la masa con las manos. Las bolas de queso finalmente son sumergidas en una salmuera fría.
• Industrial: en este proceso intervienen algunas máquinas para poder elaborar el queso mozzarella. Preparan la leche y se le agrega el cultivo de bacterias lácticas purificado, lo cual le logra dar un sabor estándar. A diferencia del proceso artesanal que intervienen también bacterias propias de la flora de la leche. Para hilar la masa del queso mozzarella interviene una máquina que hace ese procedimiento.
El queso mozzarella es usado para la elaboración de pizzas, ensaladas y otras preparaciones. Este tipo de queso proporcional algunos nutrientes como el fosforo, calcio, hierro, proteínas, potasio, yodo, zinc, carbohidratos, entre otros. Por su alto contenido de calcio es bueno para los huesos y se recomienda su consumo durante el embarazo.